Un viaje autodidacta: cómo la curiosidad y la tecnología transformaron mi vida
Soy Carlos Abdiel Hernández Higuera, y mi historia comienza en una pequeña localidad llamada Batury, en el municipio de Angostura, Sinaloa, una comunidad de aproximadamente 1000 habitantes. Crecer en un entorno donde la tecnología llegaba tarde fue un desafío que alimentó mi curiosidad innata y mi deseo por descubrir cómo funcionan las cosas. Desde joven, me fascinaban los circuitos y las máquinas, un interés que floreció gracias a mi madre, cuya creatividad y determinación siempre fueron una inspiración.
En 2010, enfrentamos un cambio importante: la necesidad de que yo estudiara fuera de nuestro rancho. Mi madre, con grandes sacrificios, decidió comprarme mi primer celular, un medio vital para mantenernos comunicados ya que la preparatoria más cercana estaba a 20 minutos en automóvil. Este gesto fue mucho más que una compra; fue un parteaguas para mi futuro.
Recuerdo claramente el día en que mi primer celular llegó a mis manos. Era un lujo que parecía inalcanzable para nosotros. Yo era el tercer hijo de cinco, y mi madre, una mujer trabajadora y madre soltera, hacía todo lo posible por darnos lo mejor dentro de nuestras posibilidades. Este celular no era nuevo ni funcional; era un teléfono que alguien vendía a buen precio por no estar en condiciones. Mi madre, con su experiencia como obrera en Samsung soldando componentes electrónicos, vio en él una oportunidad. Con su ingenio y determinación, desarmó el teléfono y comenzó a repararlo. Pacientemente reemplazó el flex de la pantalla, que era el problema principal, y logró devolverle la vida.
Aquel LG Cookie P500, uno de los primeros dispositivos con pantalla táctil, no solo se convirtió en mi primer celular, sino también en un símbolo de su sacrificio y creatividad. Tenerlo en mis manos no era simplemente poseer un teléfono; era llevar conmigo el reflejo de su esfuerzo y el inicio de mi conexión con la tecnología.
#Mi primer acercamiento autodidacta con la tecnologia
Con aquel primer celular en mis manos, comenzó una etapa que definiría mi vida. En un hogar donde acceder a internet o música era un lujo inalcanzable, cada limitación despertaba en mí una chispa de curiosidad y creatividad. A los 15 años, mi deseo de aprender me llevó a explorar foros en busca de soluciones para usar la banda ancha de Telcel y conectar mi dispositivo a internet. Fue entonces cuando descubrí Taringa.net, un espacio donde personas compartían conocimientos sobre tecnología, redes y protocolos.
Pasé noches leyendo y probando configuraciones, aprendiendo cómo ajustar APNs y aprovechar protocolos que desbloqueaban el acceso a internet en dispositivos con restricciones. Aquella experiencia no solo me permitió conectar mi celular a internet; fue mi primer contacto con el aprendizaje autodidacta y el poder de resolver problemas a través del conocimiento. En ese momento, no lo sabía, pero estaba dando los primeros pasos hacia una independencia tecnológica que cambiaría mi futuro.
Este descubrimiento expandió mis horizontes. Con un dispositivo inteligente y el acceso al fascinante mundo del internet, encontré respuestas a dudas y problemas en tiempo real. Fue el inicio de mi camino hacia la independencia tecnológica.
El nacimiento de API Market no fue un accidente, sino una respuesta directa a una necesidad que observé durante mi trabajo en Recursos Humanos. Gestionar más de 300 contrataciones semanales con un equipo de 60 personas a mi cargo era una tarea monumental. En ese entorno de alta presión, identifiqué un problema recurrente: la validación manual de documentos de identidad, un proceso tedioso que consumía tiempo y recursos valiosos.
Cada identificación debía revisarse cuidadosamente, y esta tarea, repetida en varias etapas del proceso, alargaba innecesariamente el tiempo de contratación. Me preguntaba constantemente cómo podríamos optimizar esta dinámica. Así nació la idea de una solución tecnológica que pudiera conectar sistemas con bases de datos gubernamentales para agilizar y automatizar estas validaciones.
API Market se convirtió en esa solución. Lo que comenzó como una idea para resolver un problema interno creció hasta convertirse en una herramienta poderosa utilizada por instituciones educativas, empresas de seguridad, universidades y despachos. No solo logró reducir los tiempos de proceso, sino que también liberó a los equipos para enfocarse en tareas más estratégicas, aportando eficiencia y precisión en cada paso.
#Un Ingeniero que Descubre la Programacion
Mi camino profesional inició con la Ingeniería Industrial, una carrera que elegí con el sueño de construir un futuro prometedor. Sin embargo, el destino me llevó a recorrer caminos inesperados. Durante más de nueve años, trabajé en el área de Recursos Humanos, un entorno desafiante donde aprendí a liderar equipos y a enfrentar los retos de grandes empresas internacionales. Mi día a día incluía gestionar procesos de reclutamiento, contratación y entrenamiento, mientras intentaba optimizar recursos y mejorar la eficiencia.
A pesar de los logros, siempre había una frustración latente. Los sistemas que utilizábamos eran complejos, poco intuitivos y, muchas veces, parecían más un obstáculo que una solución. Era como tratar de abrir una puerta con la llave equivocada. En esas largas jornadas, me hacía una pregunta recurrente: “¿Cómo podría simplificar todo esto?” Esa inquietud no solo alimentó mi curiosidad, sino que también encendió en mí un deseo profundo de crear herramientas que facilitaran el trabajo y liberaran el potencial de las personas.
El nacimiento de API Market no fue un accidente, sino una respuesta directa a una necesidad que observé durante mi trabajo en Recursos Humanos. Ser el responsable de 3 departmentos relacionados a la vez y gestionar la captacion y entrenamiento de más de 300 contrataciones semanales con un equipo limitado era una tarea monumental. En ese entorno de alta presión, identifiqué un problema recurrente: la validación manual de documentos de identidad, un proceso tedioso que consumía tiempo y recursos valiosos.
Cada identificación debía revisarse cuidadosamente, y esta tarea, repetida en varias etapas del proceso, alargaba innecesariamente el tiempo de contratación. Me preguntaba constantemente cómo podríamos optimizar esta dinámica. Así nació la idea de una solución tecnológica que pudiera conectar sistemas con bases de datos gubernamentales para agilizar y automatizar estas validaciones.
API Market se convirtió en esa solución. Lo que comenzó como una idea para resolver un problema interno creció hasta convertirse en una herramienta poderosa utilizada por instituciones educativas, empresas de seguridad, universidades y despachos. No solo logró reducir los tiempos de proceso, sino que también liberó a los equipos para enfocarse en tareas más estratégicas, aportando eficiencia y precisión en cada paso.
#La Filosofia de Crear para Simplificar
A lo largo de mi carrera, he llegado a comprender que la tecnología, en su esencia, debe ser un puente hacia soluciones, nunca una barrera que complique la vida de quienes la usan. Esta comprensión ha moldeado mi filosofía: crear aplicaciones que sean útiles, sencillas y prácticas, pero que, sobre todo, resuelvan problemas reales con elegancia y simplicidad.
No se trata solo de escribir líneas de código; es mucho más que eso. Es el arte de diseñar experiencias que conecten con las personas, que hablen su idioma, y que les permitan interactuar intuitivamente, independientemente de su nivel técnico. Porque al final, la tecnología más poderosa es aquella que desaparece en su uso, dejando solo la solución visible. Cada proyecto que desarrollo nace de una necesidad real, ya sea mía o de quienes me rodean. Mi objetivo siempre es diseñar interfaces intuitivas y procesos eficientes, para que incluso los usuarios con poca experiencia tecnológica puedan aprovechar todo su potencial.
#Mi camino actual
En la actualidad, mi tiempo se divide entre dos mundos que, aunque diferentes, se complementan a la perfección. Por un lado, trabajo en el área de sistemas de una compañía aeroespacial, donde cada día es un desafío que me impulsa a innovar. Aquí me encargo de brindar soporte técnico, conectar sistemas internos con el ERP de la empresa y desarrollar dashboards que transforman datos en decisiones. Este entorno me obliga a estar siempre un paso adelante, anticipándome a las necesidades y creando soluciones que impactan en el rendimiento de toda la organización.
Por otro lado, soy fundador y director de API Market, una iniciativa que nació de una necesidad concreta y que ahora conecta a empresas con bases de datos gubernamentales para automatizar procesos críticos. En este rol, atiendo reuniones con clientes, colaboro con integradores y trabajo junto a equipos de desarrollo apasionados por llevar nuestras APIs al siguiente nivel.
Elegir mantener este equilibrio no ha sido una decisión sencilla. Dedicarme por completo a API Market podría acelerar su crecimiento, pero mi experiencia en la industria aeroespacial me aporta una perspectiva única. Es un constante intercambio de aprendizajes: mientras que API Market me permite crear soluciones que simplifican la vida de muchas personas, la industria aeroespacial me enseña a resolver problemas complejos con precisión y creatividad. Este balance, aunque desafiante, me ha permitido crecer como profesional y como persona, demostrándome que los retos, cuando se enfrentan con pasión, son la clave para alcanzar el éxito.
#Aprendizaje Continuo: Mi Motor Principal
Si algo caracteriza mi trayectoria, es la insaciable curiosidad que me impulsa a aprender y explorar lo desconocido. No soy programador de profesión, pero esa etiqueta nunca ha sido un límite. Desde mis primeros pasos en el mundo de la tecnología, he dedicado incontables horas a investigar, experimentar y absorber conocimientos sobre las tendencias tecnológicas más innovadoras. Ser autodidacta no es solo una habilidad; es un viaje constante de descubrimiento. Cada reto superado, cada idea convertida en realidad, me ha enseñado a amar tanto el camino como el destino, porque en cada etapa hay una lección que fortalece mi visión y mi pasión por transformar ideas en soluciones.
#El Futuro que Visualizo
Creo firmemente que la tecnología tiene el poder de transformar vidas. Mi meta es seguir creando soluciones que simplifiquen procesos y resuelvan problemas reales. Desde plataformas que optimizan la administración hasta herramientas que protegen datos personales, cada proyecto que desarrollo lleva consigo una promesa: ser parte de un mundo más eficiente, más humano y mejor conectado.